sábado, 26 de octubre de 2013

AGUA CARIBE











Y pensar que tuve un cuerpo
hablado y abandonado por los peces
un cuerpo dormido como una fruta
una tempestad sedienta de su aire,

tierra sola: mi otro yo que me navega.

Pensar, junto a este beso en la boca
la cosmogonía lenta de las mareas bajas
los dedos de estas aguas, casi de soledad
y verme tan feliz por su luz forajida, en preguntas,
o esa máscara muy dulce bajo temblor de cielo,

el poema que no encuentro.

Los hombres no estamos concluidos,
algo nos falta, hay un eco de celajes que nos olvida,
existe una puerta terrestre que inmola y llama,
puede ser un idioma perdido a la belleza
o la falta de amor, llenándose de forasteros
y caminar, caminar sin rumbo derramados de letras.


Ver el Agua Caribe sin pasajeros,
sin gaviotas, o la prisa de una huella que se quiebre
me hace sentirme de ríos invisibles,

ésos,

los que nunca terminan el alma.

Marioantonio Rosa.© 2013

No hay comentarios:

Publicar un comentario