(variaciones a un tema de Hermann Hesse)
“Hay que estar orgulloso del dolor; todo es un recuerdo de nuestra condición elevada.”
-Hermann Hesse
Amanece a pedazos,
a cortos ríos, a corta sangre desconocida
y el lobo peina las estepas con una mirada oscura
divisa sombras usadas por el silencio
las manos verdes de los árboles contra el cielo
el zumbido de la abeja, la charca de pájaros
y el reino pisoteado de la hormiga.
Mi alma anda por la tierra,
verano en agua es mi alma al claroscuro,
una pared de palabras, ¡ay tan mías! me sigue amando
o duermo inhóspito contra su noche
pregunto esa velocidad de las nubes en el lobo
porque en sus ojos hubo guerras rasgadas en firmamentos,
cadáveres bellos derramados en su hambre
densos mapas de miedo, densos abrazos del frío,
mi alma navega en la caverna del lobo,
donde la única luz que existe es la del viento.
Amanece a pedazos de otros siglos,
las sombras son más vivas en la escalera de hojas.
Camino la bronceada herida de las figuras;
mi minuto de muerte es otra vida que responde
al rito sonámbulo del alma con la hoguera,
aúlla la existencia,
seremos devorados y débiles
tenue plegaria decapitada:
eso ha dicho el lobo.
Marioantonio Rosa.© 2014
“Hay que estar orgulloso del dolor; todo es un recuerdo de nuestra condición elevada.”
-Hermann Hesse
Amanece a pedazos,
a cortos ríos, a corta sangre desconocida
y el lobo peina las estepas con una mirada oscura
divisa sombras usadas por el silencio
las manos verdes de los árboles contra el cielo
el zumbido de la abeja, la charca de pájaros
y el reino pisoteado de la hormiga.
Mi alma anda por la tierra,
verano en agua es mi alma al claroscuro,
una pared de palabras, ¡ay tan mías! me sigue amando
o duermo inhóspito contra su noche
pregunto esa velocidad de las nubes en el lobo
porque en sus ojos hubo guerras rasgadas en firmamentos,
cadáveres bellos derramados en su hambre
densos mapas de miedo, densos abrazos del frío,
mi alma navega en la caverna del lobo,
donde la única luz que existe es la del viento.
Amanece a pedazos de otros siglos,
las sombras son más vivas en la escalera de hojas.
Camino la bronceada herida de las figuras;
mi minuto de muerte es otra vida que responde
al rito sonámbulo del alma con la hoguera,
aúlla la existencia,
seremos devorados y débiles
tenue plegaria decapitada:
eso ha dicho el lobo.
Marioantonio Rosa.© 2014
No hay comentarios:
Publicar un comentario