Estoy escribiendo desde la otra orilla; desde una trinchera clara donde se puede contemplar a un pueblo que trabaja, sufre, ama, espera, y tiene esperanza. Estoy escribiendo desde una cotidianidad, donde la sensibilidad como un radar innato, escala sombras, percepciones, desilusiones, impotencia, y le seré muy honesto: indignación. Esa "terrible esponja" que alguna vez Antonio Gala, poeta universal usó para describir lo que el escritor es capaz de absorber respecto a su entorno, y el entorno de su país, cabe perfectamente con la figura de este recado.
Voy a la memoria Señor Gobernador. Siendo muy niño recuerdo con nostalgia y cariño, -todos en un tropel, porque resisten el recuerdo-escuchar a uno de los pioneros de la locución radial, Ray Francisco Quiñones leer una estampa de Teyo Gracia y su mundo, bajo la rúbrica de Abelardo Díaz Alfaro uno de nuestros escritores capitales. Dentro de ese cuarto rodeado de libros, juguetes, y alguna poesía, me deleitaba escuchar esa voz cercana, esa voz que se humanizaba y entonces tomaba esencia y era parte de la vida familiar. Edgardo Gierbolini me enseñó parte de ese mundo de la música y la ópera; se me escapaba la imaginación escuchando a Anton Dvorak en La Sinfonía del Nuevo Mundo o Héctor Berlioz y su Sinfonía Fantástica, Manuel de Falla y El Amor Brujo o una pieza hecha con lo inolvidable, en manos de nuestro guitarrista clásico Ernesto Cordero. Y todo bajo las ondas radiales de WIPR RADIO. Sí, fue escuchando ese universo y a la manera de Borges, aliento a la imaginación que hice una entrada provocadora a la escritura, y una estancia en la poesía.
Piense, Señor Gobernador, a cuántas miles de personas les ha acontecido el mismo prodigio; un prodigio íntimo, vestido de señales, que no buscaría otra cosa sino crecer. Como ciudadano, como ciudadano votante, como ciudadano caminante en ese mundanal ruido que nos hace la cotidianidad, le escribo esta carta, que a su vez, son muchas voces, muchas manos al unísono en una diatriba de urgencia.
WIPR RADIO está en crisis; en crisis superlativa, en crisis de todo lo que cabe dentro del término caos. No deja de sorprenderme la indiferencia de su Junta de Directores, echando al silencio una serie de parámetros leales a la cultura, a la calidad en las artes no deja de sorprenderme la caterva de comerciantes que desea convertir esta emisora, en una de salterio y chabacanería, de pendejada sensual, de palabra altisonante, porque al menos, se hace dinero, y se entretienen las masas.
Sigue sorprendiendo que se mantenga en el aire a un señor, llamado Joel Rivera, como Vicepresidente de Radio-cosas veredes, mi querido Sancho, diría Alonso Quijano, el bueno-y escuchar cómo cambia a gusto los nombres universales a las obras inmortales, como un burgués amaestrado en un estuche de monerías-asumo la licencia de nuestro Luis Rafael Sánchez, y algo de Moliere-nombrar mal nombrado “Zarzuela” a la Opereta Cofresí de Rafael Hernández, o “Tusca” por Tosca de Giancomo Puccini y patentizar el nuevo nombre como correcto. Alterar las bitácoras ya escritas por artículos de merienda y chiste, como si la cultura musical fuera cosas de ir a un bar por una cerveza que esté a 75 centavos en tiempo de calor. Mala metáfora, para una realidad.
Todo no debe reducirse a la política. Malas decisiones, provocan resultados a largo plazo, si más bien toda la vida, Señor Gobernador. Sé que usted y su partido tienen excesivas boletas de gratitud, para aquellos que ayudaron en campaña, sin embargo, a cada persona su cuchara. “Zapatero a sus zapatos” diría la abuela. Ahora más que nunca, en un Puerto Rico que sobrepasa ya los 4 pisos descritos por José Luis González escritor de siempre, hace falta una fuerte inyección de cultura y de conciencia social.
En un Puerto Rico donde la inconciencia y la criminalidad hacen día a día su mensaje de abismo eliminar los estandartes culturales que han sido parte de la vida de un pueblo, no es, una elección sabia y de justicia.
Al contrario, es necesario incentivar aún más la cultura. Es urgente llevar la cultura y sus manifiestos a todos los rincones de nuestra patria. Que un preso escuche un poema, una anciana en un asilo escuche una pieza de Chopin, un joven de pocos recursos vaya al teatro, que nuestros artistas plásticos, nuestros escritores, ofrezcan talleres en cada escuela, aún la más remota, cárceles, centros de rehabilitación, hospitales con niños que ya conocen lo peor de una enfermedad. Señor Gobernador, hablo, y perdone usted, de una REVOLUCIÓN CULTURAL, capaz de edificar, transformar concienciar, hacer un país para todos, y con todos.
Y eso incluye WIPR RADIO, ALLEGRO 91.3 FM. Somos muchos los oyentes de estas emisoras, somos muchos, somos miles, los que creemos en la expansión del alma y la conciencia. Mientras muchos talentos toman la vía fácil de irse a Miami, Nueva York y otros lugares a buscar respuestas económicas, no se equivoque Señor Gobernador, aquí en Puerto Rico, hay un gran número de puertorriqueños como Roberto Ramos Perea, Ana María Fuster Lavín, Yolanda Arroyo Pizarro, Mayra Santos Febres, Ángel Matos, Jeanette Cabrera Molinelli entre otros grandes nombres de las letras, la música, la plástica, que estamos dispuestos a quedarnos aquí luchando por Puerto Rico abriendo puentes y horizontes, leyendo poesía en las plazas, y echando nuestra cultura a su lugar merecido en el mundo.
WIPR RADIO ALLEGRO 91.3 debe ser, Señor Gobernador parte de ese estado de revolución y difusión cultural, vaya usted a la gente, use a su diestra de ayudantes que ausculten, si saben trabajar y escuchar a un pueblo para usted, que se tiren a la calle, le ganrantizo, que la respuesta será inmediata: JUSTICIA CON WIPR AM Y FM , y todo su personal.
¿Lo entiende usted Señor Gobernador?
Atentamente,
Prof. Marioantonio Rosa
Poeta, Editor, Periodista Cultural
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